Antonio González Caro

Conil de la Frontera (Cádiz 1984)

Como fotógrafo parte de una base fundamental para él en sus comienzos que es la fotografía documental. Es algo que siempre está presente en sus trabajos en mayor o menor medida. Con ello aprendió que se pueden contar historias con imágenes, con fotografías.

Lo que más le motiva siendo fotógrafo es poder realizar trabajos fotográficos de larga duración, en los que intenta fotografiar su realidad más cercana con temas que despierten su interés, aunque en un principio sean desconocidos para él. Es fundamental ese proceso o aprendizaje de sentir poco a poco una fuerte unión con lo que se fotografía hasta llegar a formar parte de ello.

Desde que comenzó a fotografiar sus primeros trabajos, siempre ha intentado buscar un lenguaje cada vez más personal, donde no sólo sea importante lo que muestra en imágenes sobre el proyecto, si no que éste también hable de él como autor. Su obra ha sido reconocida con distintos premios internacionales como en LensCulture, Neutral Density, PX3 Prix de la photographie Paris, International Photography Award (IPA), Monochrome Photography, PDN photo anual, Gomma Grant, Life Framer…

Ganador de la beca Albarracín, o el premio Art photo Barcelona Copia Wall, ha sido seleccionado en distintos certámenes de fotografía como Descubrimientos PHotoEspaña, SCAN Tarragona (Talent Latent y Full Contact), Nominado Joop Swart Masterclass World Press Photo…

PROYECTO “GALLERO”

“Gallero” es un proyecto fotográfico que gira en torno a la figura del gallo de pelea. No pretende para nada describir lo que son las peleas de gallos, sino mostrar una visión muy personal de este animal y todo lo que le rodea, con un enfoque profundamente poético y dramático. Me interesa mostrar la belleza que yo veo en un tema ya de por sí complejo. El gallo es el único protagonista y toda la importancia del proyecto recae sobre él. se muestra siempre de una forma digna, honesta, casi humanizándolos…

Esto hace que se pueda llegar a ver al gallo como un reflejo de nosotros mismos, como una metáfora; dejando una línea abierta a una interpretación libre y personal. El proyecto está compuesto por imágenes en byn y en color rojo. El color rojo proviene de la luz térmica que utilizan los galleros para dar calor a los polluelos en la crianza o a los gallos adultos cuando los cuidados son necesarios.

Esto hace que estéticamente el proyecto sea más personal, pero también es muy importante ver cómo influye en cada imagen el color rojo como estímulo visual. Nos habla de la sangre como vínculo de vida, la genética, la reproducción… en un equilibrio con la violencia, la pasión, la muerte… algo que desgraciadamente está implícito en la figura del gallo.

Por un lado la vida y por otro la muerte.